Post abierto a los contados visitantes

        He tenido muchos problemas desde que me comprometì conmigo mismo a actualizar este blog con mayor frecuencia. Algunos de ellos, intuirán, son irremediables: la tiranía del tiempo, las viejas computadoras, el capitalismo y las ganas de gastarse diez pesos en un asado con amigos, las obligaciones, la idiotez...
        Entonces, mejor no auguro nada y digo que sólo cuando una (o más de una) de aquellas fatalidades no altere su letargo último, volveré a postear.

P.D.: por mi idiotez, por favor que sea pronto.