lunes, mayo 24, 2004

Fe de erratas

        Pido perdón a aquel aventurero que haya intentado dejar un comment en este blog y no haya podido. Nunca fue mi intención restringir el acceso al insulto, al halago o -mayormente- a la estupidez. Fue un error casual, producto de la abusiva ventaja que me lleva la tecnología en cuanto a inteligencia.
        Ya pueden volver a postear todos, anónimos y conocidos y así sabré, por fin, que la impopularidad no se debe a la imposibilidad.